
Me vas a tener que perdonar, pero como he trasladado desde el primer momento, voy a ser fiel a mis valores de transparencia y realismo y, por tanto, habrá veces como esta en que tendré que granjearme enemigos… ¡en este caso los bancos!
En este capítulo nos vamos a centrar en sus productos financieros orientados al ahorrador o inversor y, sobre si creo que hay que contar con esos productos financieros bancarios comparándolos con los productos que nos está ofreciendo el mercado.
Desde luego que las entidades financieras son necesarias para que funcione el sistema. Es más, tengo varios bancos en mis diferentes carteras de inversión. Así que no seré yo quién arremeta contra ellos.
1.- Algunos productos bancarios recurrentes para el ahorrador y/o inversor
1.1.- Como ya hemos hablado, una vez definido nuestro plan y definidos nuestros gastos, el siguiente paso era construirse el fondo de emergencia. Aquí sí que considero que dicho fondo deberá estar bien seguro y a buen recaudo en una cuenta bancaria y, si dicha cuenta es remunerada, mucho mejor.
Esto dependerá del momento en el que nos encontremos ya que ha habido épocas en las que con los tipos de interés al 0% no existían otras opciones, pero llegado tu momento analízalo. Piensa que un 0,5% o un 1% te va a ayudar a compensar esa tasa de inflación que históricamente ha promediado al 2%. Así que si consigues depositar tu fondo de emergencia al 1% ya estás perdiendo menos poder adquisitivo del mismo. Eso sí, siempre considera tener dicho fondo en una cuenta o depósito que puedas liquidar de forma sencilla e inmediata.
1.2.- Por otro lado, desde luego los bancos son nuestros aliados desde el punto de vista del endeudamiento para inversiones inmobiliarias. Y sólo hablo de deuda para inversiones inmobiliarias porque como ya hemos comentado se trata de una deuda buena, ya que con dicho capital podremos optar a adquirir un activo que nos genere un cash flow (si vamos al modelo de alquiler) o una revalorización (si vamos al modelo de reforma y venta).
A partir de aquí tenemos que analizar a los bancos con lupa y, sobre todo, cuando son ellos los que vienen a nosotros y no nosotros los que les necesitamos.
Aunque te parezca extraño el modelo de las entidades financieras ha cambiado y mucho, después de los muchos años con los tipos de interés cercanos a 0% sus márgenes se han ajustado mucho y han tenido que focalizarse en nuevos productos que les permitiera seguir siendo rentables. Esto unido al inevitable proceso de transformación digital al que se han visto abocados, y han tenido que reconvertir el modelo tradicional de oficina física a un modelo de atención diferente, remota, digital y muy a medida de sus clientes.
Es por ello que dentro de los objetivos de estas entidades está la colocación de productos que a ellos les interesa y no los que nos interesa a nosotros: seguros, fondos, alarmas, televisiones, planes de pensiones… todos ellos productos tradicionales enfocados claramente a sus beneficios y no a los del particular.
Capítulo aparte serían sus seguros que nos obligan (o invitan) a que contratemos cuando solicitamos sus hipotecas. Bajo mi punto de vista son condiciones fruto del desequilibrio o asimetría en la relación entre el banco o el inversor. En muchas ocasiones no nos ha quedado otra opción que contratar sus seguros, sean o no los más económicos del mercado.
En estos casos dichas contrataciones de seguros vienen a bonificar el tipo de interés diferencial que aplica el banco y haciendo los números puede resultar incluso beneficioso. Es por ello que habitualmente he contratado dichos seguros, pero siempre porque el resultado es positivo para mí.
Pero más allá de este tipo de seguros orientados a la deuda buena que nosotros vamos a buscar están los seguros y resto de productos que ellos nos ofrecen a nosotros.
2.- Productos bancarios ofrecidos por el sistema financiero bancario
Vaya por delante que en ningún caso estoy dando recomendaciones de inversión o no, sino que estoy opinando sobre la rentabilidad o no de dichos productos, sobre sus comisiones y, básicamente, hablando sobre mi experiencia personal.
2.1.- Plan Individual de Ahorro Sistemático (PIAS)
Como su nombre indica se trata de un producto orientado al ahorro en el que realizas aportaciones periódicas y donde te ofrecen una rentabilidad que pueden o no garantizarte.
En esencia la filosofía de estos productos es adecuada, te crean un sistema de ahorro sistemático, con aportaciones periódicas y te obligan a retirar ese dinero, además, orientado a una hipotética jubilación o momento de necesidad, por tanto la esencia es adecuada.
Pero como veremos en la reflexión final sobre su rentabilidad sus comisiones directamente desaconsejan este tipo de productos.
Estamos hablando de productos que te pueden garantizar un 2% de rentabilidad que apenas sí cubriría la inflación, pero a eso le tienes que deducir sus comisiones o costes de mantenimiento lo que hace que al cabo del tiempo apenas tengas tu propio dinero ahorrado…
Piensa que si el mercado ha crecido un 8% de media en los últimos 100 años, si hay empresas que reparten en dividendos 4, 6 u 8% y ellos te están ofreciendo un 2%, ¿quién se queda con ese diferencial de tu dinero? Te dejo a ti la respuesta.
2.2.- Plan de pensiones
Otro producto esencial de las entidades financieras son sus planes de pensiones. Aquí sí que podría ponerme crítico, mucho, y no sólo contra los bancos, sino con el propio sistema que nos tienen diseñado…
Vuelvo a insistir que creo que el sistema público de pensiones no funciona, que es una estafa piramidal que se basa en que cada generación está pagando con sus cotizaciones sociales las pensiones de las generaciones anteriores que ahora están cobrando dicha jubilación. Y que cuando los jóvenes actuales vayamos a jubilarnos (¿con 70 años?) ¿cuántos trabajadores en activo habrá que puedan pagar nuestra jubilación?
A esto hay que añadirle que durante muchos años se está incentivando la aportación en este tipo de planes de pensiones con una serie de deducciones fiscales, aunque en los últimos años se están reduciendo y es posible que en algún momento las retiren completamente. Pero, ¿por qué de esas deducciones? ¿Es realmente un plan estratégico de apuesta a la inversión privada para complementar la pensión pública? Entonces, ¿por qué antes la deducción era de 8.000€ y ahora se está reduciendo paulatinamente a 2.000€, 1.500€?
Más allá de este debate que creo que deberíamos de verdad tomarnos muy en serio está la rentabilidad de dichos planes de pensiones privados.
Vaya por delante que de nuevo su filosofía es correcta, por supuesto, todos los productos están bien diseñados, tienen su argumentario de venta y están perfectamente justificados para que el pequeño inversor pique su anzuelo. El problema está en la letra pequeña y de nuevo en el desequilibrio de la relación entre el banco y el particular.
Ellos diseñan sus planes de pensiones con carteras de fondos de inversión, en los productos que ellos consideran y tienes que saber que en los últimos 10 años menos del 12% de los fondos privados superan a los índices.
Por tanto, el primer problema que tienen estos planes es que tienen una rentabilidad peor que los índices.
Sigamos analizando, estamos hablando de planes de pensiones, por tanto concebidos a muy largo plazo y, además, pensados para no tocarlos hasta la jubilación, por lo que son muy poco líquidos y el retiro previo a la jubilación se penaliza tanto en rentabilidad como desde el punto de vista fiscal.
Y, por último, y no por ello menos importante, están las comisiones de gestión de dichos planes que pueden rondar entre el 1-1,5%. Nuevamente pensado que estos planes de pensiones están concebidos a muy largo plazo hay que pensar en la importancia de esta comisión y lo que penaliza a tan largo plazo.
En este sentido están apareciendo nuevas opciones de planes de pensiones generalmente potenciados por los fondos indexados y de los roboadvisors de los que hablaremos en capítulo aparte. En este sentido estamos hablando de comisiones del 0,1-0,2% y esto cambia muchísimo la rentabilidad a largo plazo y lo vamos a demostrar en un ejemplo.
Todos estos puntos negativos se compensaban con las deducciones fiscales en el pasado, que eran el incentivo para la aportación intentando acercarse a esos mínimos que optimizaban la carga fiscal. Pero ahora que no está incentivado, con todos los puntos negativos que hemos visto tengo mis dudas sobre este tipo de productos.
2.3.- Fondo de inversión
En cuanto a los fondos de inversión poco más tendríamos que añadir diferente a los planes de pensiones.
Todos los puntos negativos tratados sobre los planes de pensiones aplican también sobre los fondos de inversión, ya que al fin y al cabo es el mismo concepto únicamente que no están concebidos para la jubilación sino únicamente para la inversión.
En este sentido, los fondos de inversión no tienen deducciones fiscales, pero sí que tienen la ventaja de que se pueden trasladar de un fondo a otro sin tener que pagar impuesto por el rendimiento obtenido hasta que no se liquide total o parcialmente el dinero invertido.
Pero nuevamente, las rentabilidades son el 88% de los casos inferiores a los índices de referencia y de nuevo sus comisiones son altas, pueden llegar hasta el 2,25% que a largo plazo es una verdadera barbaridad y como hemos visto en el ejemplo con los planes de pensiones un 1% de diferencia de comisión a largo plazo impacta muchísimo.
Históricamente, de nuevo, se han vendido estos planes y fondos porque el sistema asusta al pequeño inversor sobre lo difícil que es invertir, lo difícil que es decidir y gestionar una cartera de inversión y que eso se lo tienes que dejar al banco, que son los expertos… Pues para ser expertos sólo 12 de cada 100 conseguís batir al índice.
Y créeme, afortunadamente hoy tenemos alternativas muy sencillas para invertir en fondos indexados a través de roboadvisors y plataformas que desde luego ni son complejas ni aplican esas comisiones. De hecho este tipo de plataformas aplican comisiones de entre el 0,1-0,4% muy inferiores a los fondos bancarios.
Esta alternativa nos permite invertir en fondos indexados que replican índices que, como ya vimos en el artículo: “Invierte en fondos indexados”, nos permite múltiples opciones. Es mucho más barato desde el punto de vista de comisiones y, cuanto menos, pueden conseguir rentabilidades mayores.
2.4.- Cuentas de ahorro
Por último podríamos hablar de las cuentas de ahorro, de nuevo la esencia es buena ya que invitan al particular a ahorrar, y esto siempre será bueno.
El punto negativo es que se tratan de cuentas con nula o muy baja rentabilidad, en muchos casos permiten depositar tu dinero en una cuenta remunerada que como hemos dicho puede servir como máximo para tener nuestro fondo de emergencia, pero poco más.
2.5.- Tabla comparativa de productos financieros bancarios
Aquí te dejo una tabla comparativa con porcentajes medios de comisiones, tipos de interés y gastos de cancelación para estos productos bancarios.

Conclusión
Cada uno de los productos financieros y algunos más similares, seguros de ahorro, fondos garantizados o no, depósitos y similares tienen la misma esencia y es aquí donde radica mi opinión negativa: el interés del banco no es tu interés. Es decir, el objetivo del banco es ganar dinero y el tuyo es generar rentabilidad, y el banco genera margen por las comisiones de sus productos, y esas comisiones son un lastre muy grande para tu rentabilidad a largo plazo.
Y como veremos más adelante hay estrategias con diferente intensidad de conocimiento, de actividad y de dedicación que son mucho más rentables que estos productos y en los que tienes control.
Yo hablo desde mi experiencia y de muchas conversaciones con inversores más o menos expertos, con amigos que trabajan en banca y son críticos con el propio sistema de sus propios bancos, pero sobre todo desde mi experiencia como ahorrador e inversor particular.
He tenido depósitos, he tenido planes de pensiones bancarios, he tenido PIAS y he tenido fondos bancarios.
Su baja rentabilidad, sus altas comisiones y el nulo control y poder de maniobra que llegas a tener (tienen muy poca flexibilidad porque son productos muy generalistas) hacen que para mí no sean una opción en mi estrategia de diversificación en activos.
Pero te dejo a tu propio criterio y reflexión la decisión de si encaja en tu plan.
- 0 Comentarios
- 40 pasos para alcanzar la libertad financiera
- 11 de marzo de 2023